twiteros cubanos libres

Mostrando entradas con la etiqueta biografía. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta biografía. Mostrar todas las entradas

domingo, 9 de septiembre de 2012

#Venezuela El verdadero fraude de las elecciones en Cuba

Por: Ana C. Fuentes

Cualquier alma cándida o dispuesta a que le endulcen los oídos encontrará en los principios en los que está basada la Ley Electoral cubana razones para defender que se trata del sistema más democrático del mundo. Nada de partidos, es el pueblo proponiendo y eligiendo a sus representantes. Nada de campañas electorales millonarias: apenas una escueta biografía de los candidatos colgada en la puerta de algún colegio, farmacia o bodega. Vecinos conocidos por sus vecinos. ¿Hace falta más?

Aún pretendiendo ignorar el significativo hecho de cómo se pactan las nominaciones, habría que preguntarse qué poder tienen esos representantes del pueblo —sin presupuesto ni recursos ni potestad— para solucionar los problemas de sus electores, asuntos tan simples como los baches de una calle, el techo del colegio o la falta de un servicio de recogida de basura. A saber, estos representantes conforman parte de la Asamblea Municipal del Poder Popular, que a su vez elige los representantes a la Asamblea Provincial, que a su vez elige los candidatos a la Asamblea Nacional que es la que, supuestamente, “expresa los deseos soberanos del pueblo”, según reza la Constitución.

Claro que en todo esto hay cuotas. Detrás de toda esta maquinaria están las Comisiones de Candidaturas, presididas por un representante de la Central de Trabajadores de Cuba (el único y vertical sindicato cubano) e integradas por miembros de todas las llamadas organizaciones de masas (los Comités de Defensa de la Revolución, la Federación de Mujeres Cubanas, la de agricultores y las de estudiantes universitarios y de enseñanza media) que a estas alturas pocos dudarán que responden a una única voz (la del Partido Comunista) que no es precisa y necesariamente la del pueblo sino la del poder. Estas organizaciones copan, con sus propios representantes, las asambleas. De modo que el pueblo llano sólo integra como máximo el 50% del gobierno provincial y nacional. La otra parte la componen los de siempre, nominados ‘desde arriba’ por las propias estructuras de poder.

Cierto que el pueblo vota, desde la última reforma del sistema electoral (1992), cada 5 años, por los candidatos a la Asamblea Nacional. De ahí que la campaña institucional cuando corresponden estos comicios insista en el ‘voto unido’, una cómoda casilla al principio del boleto para votar de golpe por todos. La explicación oficial es que la gente no vaya a dejar de votar por algún infeliz representante desconocido, pero cualquier persona mínimamente avispada entenderá que lo que se pretende evitar es todo lo contario: que la gente no vote por los conocidos, los históricos, los que llevan 51 años prometiendo sin cumplir.

Capítulo aparte merece el asunto de la participación. La presión para ir a votar es puerta a puerta. En Cuba, aunque la ley electoral aclara que no es obligatorio ejercer ese derecho, el discurso va por un lado y la realidad por otra. Pioneritos aspirantes a ser como el Che y cederistas comprometidos con la defensa de la revolución, despliegan ese día un gardeo a presión para que nadie ‘olvide’ su compromiso ciudadano. Algunos, pocos aunque cada vez más, hartos de tanto cuento, declinan directamente la invitación o se inventan algún viaje para esa fecha, pero cualquiera que esté al tanto de la psicología del miedo instalada en Cuba entenderá que la gente vaya a votar en porcentajes que envidiaría cualquier democracia occidental: jugarse el cartel de ‘desafecto’ puede dar al traste con un puesto de trabajo o con la posibilidad de terminar los estudios o, si estás en trámite de viajar o tienes aspiración de hacerlo, con el dichoso permiso de salida. Con todo, las mesas electorales no tienen muchos reparos a la hora de alterar el censo. Recuerdo uno de los últimos procesos electorales que viví en Cuba, como miembro de una de esas mesas, cuya presidenta a la hora del cierre del colegio procedió a eliminar, convenientemente, a varias de las personas que no votaron porque “ya no vivían en el barrio”.

Tampoco se explica muy bien por qué si gran parte de los 2 millones de cubanos que vivimos fuera de la Isla tenemos derecho a ejercer el voto (tenemos inscripción consular, estamos obligados a viajar a la isla con el pasaporte cubano, por el que nos cobran un riñón, no estamos locos ni cumplimos condena y además representamos una fuente importante de ingresos para la economía del país), no hay colegios electorales en las embajadas y consulados cubanos. O sea, en la práctica no contamos como electores, o lo que es peor, el gobierno nos impide ejercer ese derecho. ¿Por qué los consulados y embajadas cubanas invitan a los cubanos residentes en el exterior a firmar manifiestos en defensa del régimen y en cambio no procuran un espacio electoral para ellos?

Cuando el lunes las alertas de Google reboten una y otra vez la propaganda oficial, el mundo amanecerá con la noticia de que más del 96% de los cubanos acudieron a las urnas, unas cifras que representan una “contundente” respuesta a la “feroz campaña mediática” desatada contra Cuba. Y voy yo y me lo creo.

Fuente: http://orlandozapatatamayo.blogspot.com/     

Orlando Zapata Tamayo

lunes, 9 de abril de 2012

Más papel higiénico para Cuba: se viene biografía de esposa de Fidel

Preparan biografía sobre esposa de Fidel Castro


Dalia Soto del Valle en una presentacion de Fidel Castro ante el Parlamento cubano en agosto del 2010.Por Wilfredo Cancio Isla
La enigmática existencia de Dalia Soto del Valle Jorge, la esposa de Fidel Castro, quedará plasmada en una biografía que prepara la periodista exiliada Nancy Pérez Crespo bajo el título de La compañera.
“Valga decir que es una biografía no autorizada, por razones que no hay que explicar”, bromeó Pérez Crespo en entrevista con CaféFuerte.
Luego de tres años de investigación, la autora dijo que planea concluir el libro en los próximos meses y lanzarlo al mercado para finales del 2012.
“Será una biografía que mezcla los datos investigados con testimonios personales, incluyendo mis recuerdos sobre Dalia y su familia en Trinidad”, comentó Pérez Crespo, periodista y editora de larga trayectoria en Miami.
Natural de Cueto, en el oriente de Cuba, Nancy Turruzeta (su nombre de soltera) se trasladó con su familia a Trinidad a los 11 años.  Fue en esa ciudad colonial de la antigua provincia de Las Villas donde conoció a los Soto del Valle Jorge y entabló una entrañable relación con Fernando, el menor de los tres hermanos.

Amigos de la infancia

“Fernandito [Soto del Valle] y yo fuimos juntos a la escuela y desde esa época nos unió una gran amistad”, relató Pérez Crespo. “Nunca olvido el día que fue a despedirme cuando supo que yo me iba del país”.
Corría el año de 1965 y sería –sin saberlo- el último encuentro entre ambos. Nunca más se vieron y Fernando falleció en Cuba hace pocos años. Pérez Crespo nunca ha regresado a la isla.
“El [Fernando] fue hasta Cabaiguán a despedirme y allí me confesó detalles de la relación de su hermana Dalia con Fidel Castro, y de dos hijos que ya tenían en concubinato”, rememoró Pérez Crespo.
Para entonces habían nacido Alexis (1962) y Alexander (1963). La pareja tuvo después a Antonio (1969), Alejandro (1971) y Ángel (1974), aunque el matrimonio no se hizo efectivo hasta 1980, luego del fallecimiento de la asistente personal de Castro, Celia Sánchez Manduley, víctima de cáncer.
“La familia no estaba conforme con la relación de Dalia y Fidel Castro, que se inició hacia 1961”, contó la periodista. “Hay que tener en cuenta que ellos eran de una familia que fue también expropiada durante el proceso revolucionario”.

Una familia acaudalada
Los Soto del Valle eran propietarios de fincas y tenían importantes acciones en la Fábrica de Cigarros Eva, en Trinidad. El padre  se llamaba Fernando Soto del Valle Guinart y la madre Blanca Lidia Jorge, y además de Dalia y Fernando tuvieron una tercera hija, Caridad, que reside actualmente en La Habana.
Pérez Crespo recuerda a Dalia Soto del Valle como “una mujer bella, rubia y ojos verdes, a quien Fidel Castro conoció siendo secretaria del INRA [Instituto Nacional de Reforma Agraria]”
“Hay muchos enigmas que desentrañar detrás de esta mujer, que ha permanecido en las sombras del poder durante décadas”, agregó.
Pérez Crespo dice que tiene aún pendientes varias entrevistas para completar historias inconclusas en la vida de esta mujer, alejada de los actos públicos y prácticamente desconocida por la población cubana hasta fechas recientes. Por lo pronto ha hecho un alto en su programa En Sintonía, en la emisora radial La Poderosa (670 AM), para dedicarle tiempo a la investigación y escritura del libro.
Un manto de misterio y silencio se ha tendido sobre la esposa de Fidel Castro durante décadas. Nunca fue presentada ni considerada como Primera Dama del país, título que extraoficialmente recayó en Vilma Espín (1930-2007), esposa de Raúl Castro.

Saliendo a la luz pública
No fue hasta noviembre de 1999, durante un juego de béisbol entre Cuba y Venezuela en el estadio Latinoamericano de La Habana, en presencia de Fidel Castro y Hugo Chávez, cuando se vio por primera vez a Dalia Soto del Valle en una actividad pública a través de los medios de comunicación.
Pero imágenes suyas comenzaron a aparecer con más frecuencia hacia el 2000, a raíz de la campaña lanzada en Cuba por el regreso del balsero cubano Elián González. Tras la enfermedad de Fidel Castro, en el 2006, su presencia se ha hecho cada vez más ostensible al lado del esposo enfermo.
Al parecer, la determinación de Dalia fue clave a la hora de cambiar el rumbo al tratamiento médico que recibió inicialmente Castro, quien estuvo al borde de la muerte a finales del 2006, luego de una primera operación intestinal.
Recientemente se le vio acompañando a Fidel Castro al encuentro con el Papa Benedicto XVI en la Nunciatura Apostólica de La Habana, el pasado 28 de marzo.
“Creo que va a ser un libro revelador sobre la familia de Fidel Castro”, aseguró Pérez Crespo. “Nos vamos a enterar de unas cuantas cosas”.
La autora de La compañera planea que el libro esté publicado para fines de noviembre.

Fuente:  http://cafefuerte.com/cuba/noticias-de-cuba/1750-preparan-biografia-sobre-esposa-de-fidel-castro